- La oferta consistió en sumar un 6% en el mes de febrero al 10% que ya estaba acordado desde principios de diciembre
- Elimina el FONID, lo que implica una reducción de los salarios de la docencia de colegios universitarios
Después de la feroz devaluación de diciembre, el gobierno finalmente convocó a la paritaria salarial del sector docente y nodocente de las Universidades. La oferta evidencia la decisión de consolidar el ajuste por la vía de la licuación de los salarios, lo que supone un ataque directo contra el sistema universitario.
La oferta consistió en sumar un 6% en el mes de febrero al 10% que ya estaba acordado desde principios de diciembre.
Además, el gobierno dio por terminado el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), lo que implica una reducción nominal de los salarios de lxs docentes de los colegios universitarios.
También resolvió aplicar el decreto 1007, firmado por el entonces presidente Menem en 1995, que deja la negociación paritaria en manos del CIN y los representantes gremiales, retirando al Estado Nacional de la misma.
Como se evidencia en el gráfico que acompaña esta nota, los magros aumentos de diciembre y la actual propuesta nos dejan muy por detrás de los niveles de inflación registrados en estos meses. De esta manera, los trabajadores y trabajadoras universitarias vamos a perder un tercio de nuestro salario entre diciembre y febrero. De manera unánime, las Federaciones en su conjunto rechazaron la oferta.
Desde el FAB advertimos que esta política salarial se suma al congelamiento presupuestario de las universidades, los recortes en las partidas salariales de varias de ellas, la paralización de la obra pública y la amenaza sobre los cargos más precarios. Se trata de un ataque a las universidades argentinas desde todos los frentes, en el marco de una avanzada contra el conjunto de los trabajadores, expresada también ayer en el fracaso de la negociación en el Consejo del Salario.
La docencia universitaria está de pie, recibiendo a las y los nuevos estudiantes que inician sus carreras con expectativas de progresar a través de la educación de excelencia de nuestras Universidades. En las aulas y en las calles, seguimos dando el debate y construyendo las herramientas para defender nuestro sistema universitario y científico, orgullo nacional.
